Síguenos y entérate de nuestras informaciones al instante:

José Ramírez: “Cogí lucha, pero nunca desistí”

Por Cynthia Morillo / El Caribe - 28 de julio, 2017 - Artículo Original
José Ramírez
José Ramírez
Muchos dudaron de lo lejos que podría llegar. Pero, José Ramírez nunca se detuvo y con su talento y perseverancia cruzó críticas y carencias hasta convertirse en lo que es hoy.Todo empezó como un sueño a los siete años, de la mano de su padre Enrique Ramírez. Hoy ‘Minime’, como llaman a Ramírez, sus compañeros de equipo, está viviendo lo que él describe como una ‘bendición de Dios’, además de un contrato de cinco temporadas y 26 millones de dólares con los Indios de Cleveland. “Esto es algo que Dios me está bendiciendo mucho, y me siento súper feliz. De que me haya sucedido tan rápido, no me puedo sorprender porque yo confió en mi trabajo y el esfuerzo y la dedicación que le pongo”, expresó elCaribe. “Es una bendición que Dios le da a uno, súper contento por mi contrato. Lo que uno consigue eso es lo que uno espera, yo espero más y seguiré trabajando por más”, enfatizó Ramírez, quien batea .325, 17 cuadrangulares y 51 impulsadas. Ramírez, nativo de Baní, fue una pieza fundamental para que los Indios acudieran el año pasado a su primera Serie Mundial desde 1997. “Yo nunca había vivido eso, y vivirla de ahí a ahí (Serie Mundial), no es fácil. Llegamos bastante lejos, súper contento por mi equipo, nadie esperaba eso de Cleveland”, enfatizó el tercera base. Para José, el camino no ha sido fácil, pues como miles de peloteros nacidos en la República Dominicana, ha tenido que luchar para llegar hasta donde está. Primero, luchó contra las precariedades que vivió junto a su familia, luego rompió las barreras de su físico, y por último se adaptó a un país diferente al suyo y demostró que había nacido para ser pelotero profesional de Grandes Ligas. “Todos tenemos que pasar por esa, coger lucha, esto es un camino largo, hay jugadores que cogen más lucha que otros. Yo cogí lucha, pero nunca desistí, escuchando muchas críticas, pero gracias a Dios no me afecto”, agregó Ramírez, quien además de su ofensiva sobresaliente, también ha sido uno de los mejores antesalistas en las Mayores en esta temporada. Ramírez, de 24 años, emergió como una potente fuerza en el orden de bateo de la Tribu la temporada pasada, cuando hubo muchas bajas significativas, bateó .312 con 46 dobles y un OPS de .825 y continuó su ritmo esta campaña elevando su rendimiento y ganándose un boleto al primer Juego de Estrellas en su carrera. “Yo siempre pienso que nada es imposible, fue una bonita experiencia. Me siento muy feliz, gracias a Dios y también a los fanáticos que me apoyaron bastante, y votaron todos por mí, para que yo abriera en ese juego”, dijo José, quien confesó que su madre Xiomara ha sido su mayor inspiración en la vida para luchar contra las adversidades. Precisamente, esas adversidades han convertido a Ramírez en un jugador fuerte de mentalidad y capaz de lograr todo lo que se propone. ¿Sabes qué me ha ayudado?”, preguntó Ramírez con rostro serio. “Hubo muchas críticas sobre mí, mi tamaño y eso, pero yo no me enfoqué en eso, me inspiraba a trabajar más duro. Decía que yo vine a ser un ganador a aportar lo mejor de mí, y a tratar de ayudar a que mi equipo gane”. En estos momentos, José tiene promedio de bateo de .316 con 17 jonrones y 52 impulsadas. Es segundo en dobles en la Liga Americana con 31. “Estoy preparado para la batalla, hasta como receptor juego, yo lo que quiero es aportar a mi equipo a ganar, no importa dónde sea”, sostuvo José, quien la campaña pasada jugó en cuatro posiciones y se desempeñó en todos los turnos de la alineación cuando le tocó salir a batear.
Suscribirte al Club

Recibe todas nuestras novedades inmediatamente en tu correo electrónico.