Por segunda vez en 30 años las
Águilas y
Escogido tendrán que definir quién es el campeón, después que los Cibaeños superaran 9-2 a los escarlatas en un partido que se vio empañado por incidentes acontecidos en la parte de abajo del octavo inning en un animado estadio Cibao que se llenó a toda capacidad.
Es la tercera ocasión que las
Águilas se ven en una final que se va al límite de nueve juegos y esta noche tratarán de desquitarse el revés infligido por los Leones en la temporada 1980-81, cuando el
Escogido se llevó la corona.
Ambos equipos llegan hoy con 4-4. Las
Águilas, actuando de visitante en el parque Quisqueya han anunciado a su estelar
Raúl Valdés, que ha trabajado muy bien para el conjunto, mientras que el
Escogido, dueño de casa, tiene previsto llevar a la lomita de los sustos a
Aneury Rodríguez.
En un partido celebrado a casa llena las
Águilas tuvieron su mejor juego ofensivo con un total de 9 anotaciones, encabezada por los jardineros Brandon Moss y Carlos Gómez, quienes pegaron sendos jonrones y hit, con par de vueltas remolcadas y una anotada por parte. No menos oportuno estuvo Joaquín Arias, que pegó par de sencillos, uno de ellos para traer una vuelta a la goma y también Elián Herrera, quien con su juego alegre, despachó tres imparables y anotó cuatro veces.
Los cibaeños utilizaron seis lanzadores, pero fueron los cuatro relevistas finales (Ángel Castro, Wilkins Arias, Luis Perdomo y
José Rafael Díaz) quienes aguantaron las amenazas escarlatas, trabajando 4.1 en blanco, con sólo dos hits, tres ponches y dos golpeados. Ganó Castro (1-0).
El
Escogido utilizó los servicios de siete lanzadores, con Francisco Liriano (0-2) de abridor, pero no pudieron contener la embestida de las
Águilas. Perdió Liriano. Los lanzadores relevistas Jonathan Arias y Yonata Ortega debieron ser expulsados del partido cuando hicieron lanzamientos que el árbitro Christopher Vines, consideró intencionales. En la parte de abajo del octavo inning el lanzador Jonathán hizo un pitcheo que pasó cerca de la cabeza de Joaquín Arias lo que provocó que se vaciaran las bancas y la seguridad interviniera para evitar que el público se tirara al terreno y su sucesor Ortega también hizo otro lanzamiento a Miguel Tejada que pasó por encima de su cabeza.
Los Leones no tuvieron fortuna, pues pese a que batearon nueve hits y tuvieron varias oportunidades para producir carreras, fracasaron, dejando en circulación a nueve.
Andy Dirks fue un hombre de respeto en la alineación, con dos hits remolcadores, incluyendo un triple y Julio Borbón que conectó tres incogibles, con un doble.
Las carreras
El partido se mantuvo cerrado en las tres primeras entradas con un duelo de pitcheo entre Barceló y Liriano.
El
Escogido marcó primero con una en el primero, mediante un triple productor de
Andy Dirks, pero las
Águilas reaccionaron produciendo dos, aprovechando un hit remolcador de Moss y un pelotazo a Juan Carlos Pérez, con las bases llenas para poner la pizarra 2-1.
El
Escogido empató el partido a dos en la parte de arriba del tercero con un hit empujador de Dirks para traer a la goma a Borbón que había pegado doble.
En lo adelante, las anotaciones fueron para las
Águilas. Moss conectó un largo jonrón por el bosque central, su tercero de la serie, para dar una ventaja (3-2) que los cibaeños jamás perdieron. Hicieron otras dos en el cuarto con un cuadrangular de dos carreras de Carlos Gómez, que sentenció el partido (5-2).
Agregaron otra en el noveno por hit remolcador de Joaquín Arias y un racimo de tres en el séptimo con doble empujador de
Pedro Ciriaco, sencillo remolcador de Elián Herrera, quien después anotó por wild pitch de Jonathan Arias para poner la pizarra 9-2 y así concluyó.
